En un mundo en el que navegar en un dispositivo móvil o en las redes sociales parece ser la norma en materia de romance, IntercambioCasas podría ser el último lugar en el que te esperas encontrar el amor. Sin embargo, cuando lo piensas mejor, tiene sentido. A medida que vas conociendo a alguien, buscas los puntos comunes a partir de los cuales construir una dinámica de relación. ¿Os gustan los mismos libros? ¿Hay una película que os chifla a los dos? En IntercambioCasas, existe al menos algo que compartís con toda seguridad: los viajes. Cada uno tiene motivaciones diferentes pero, al final, todo se resume en explorar el mundo y compartir esa experiencia con los demás.
Estas conexiones son cada día más comunes a medida que la red de IntercambioCasas crece. Nuestros socios nos han contado muchas historias de largas amistades entre personas de distintos lugares del planeta, como las de Sandra de Londres y Jim en Palm Springs, California, Angela en Roma, Italia y Rosalie y Tony en Perth, Australia o Amanda de Long Beach, California y Oliver de París, Francia. Todos ellos, de distintas edades y trayectorias personales, se convirtieron no sólo en amigos sino en amigos para toda la vida.
A veces el amor que une a una pareja recibe un toque de varita mágica de IntercambioCasas. Es exactamente lo que les pasó a Sheila y Tom. Estaban planeando su boda y les hubiera gustado visitar Escocia para su luna de miel. Apenas una semana después de haberse registrado en IntercambioCasas, recibieron una propuesta de una pareja que vivía en el lugar exacto de sus sueños, ¡y además las fechas coincidían! Tenía que pasar. Descubre el resto de este intercambio muy feliz aquí.
En otros casos, como en la historia de Riemer y Agnes, el amor surge de un encuentro fortuito. A pesar de que ambos proceden de la misma región de los Países Bajos, el medio de contacto entre ellos ha sido IntercambioCasas. Agnes vivía en Sudáfrica y Riemer aún su país de origen, cuando ambos decidieron visitar Australia. Riemer se había puesto en contacto en el pasado con Agnes para un posible intercambio, pero cuando se dieron cuenta de que los dos iban a visitar Noosa, en Australia, pensaron que no podía ser una mera coincidencia. Quedaron para cenar, estableciendo así el primer contacto. Luego la tecnología moderna les ayudó a mantenerlo y, finalmente, su relación se transformó en amor.
También están Margie y Ian. Ian quería intercambiar su casa de Queensland, en Australia, por una en Florida y escribió a Margie. Como es lógico, se dieron cita para comunicarse toda la información necesaria sobre la casa. A medida que el tiempo pasaba, la relación se convirtió en algo más, a tal punto que terminaron casándose. Nunca se sabe en qué lugar del mundo te puede alcanzar la flecha de Cupido. Lee su historia completa en este post.
Estos miembros son todos diferentes pero tienen algo en común. Como muchos otros de la comunidad de IntercambioCasas, han querido vivir una relación auténtica y profunda.
Y me pregunto… ¿serás tú mi partner de intercambio?
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